Papa,
Mama,
Mis
manos son pequeñas y por eso se me bota la leche aunque no quiera.
Mis
piernas son cortas por favor, espérame y camina más despacio, así puedo andar contigo
Por favor mírame cuando yo te hablo, así se que me estas escuchando.
Mis
sentimientos todavía son tiernos, no me regañes todo el día, deja que me
equivoque sin hacerme sentir estúpido.
No
esperes que la cama que haga o el dibujo
que pinte sean perfectos, ámame por el hecho de haber tratado de hacerlo lo
mejor posible, recuerda que soy un niño y no un adulto pequeño.
A
veces no entiendo lo que me dices.
Te
quiero tanto, por favor ámame por lo que soy y no por las cosas que hago.
No
me rechaces cuando estés molesto conmigo y vengo a darte un beso: Me siento solo, abandonado y con
miedo.
Cuando
me gritas me asusto, por favor explícame que es lo que he hecho.
No
te enfades cuando en la noche, las sombras y la oscuridad, me dan miedo, cuando
me levante y te llamo, tu abrazo es lo único que me devuelve la paz.
Me
siento muy triste cuando ustedes discuten a veces pienso que es por mi culpa y
se me encoge el estomago y no se que hacer.
Me
meten miedo con el infierno y no se lo que es, pero pienso que debe ser algo así
tan terrible como estar sin ustedes dos.
Te
molestaste porque me ensucié jugando, pero es que la sensación del barro en mis
pies era tan rica y la tarde tan linda, ojala supiera lavar para limpiar mi
ropita.
Hoy
me sentí entre tus manos y no me preocupe mucho. Trate de entretenerte con mis
juegos y mis cuentos y me dieron un par de nalgadas y me sacaron de tu lado.
Papa,
Mama,
Que
haría yo si ustedes murieran.
Tengo
mucha suerte, entre todos los niños del mundo.
Ustedes
me escogieron a mí.
Los
amare y necesitare siempre.
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